Salud

Por qué no hacer cumplidos sobre la apariencia física

Por qué no hacer cumplidos sobre la apariencia física

Cada persona ha vivido la pandemia del COVID-19 de una manera diferente. A unos les ha dado por cocinar y a otros por hacer deporte, a unos les ha dado por hacer puzles y a otros por hacer maratones de series y películas, algunos han disfrutado el tiempo en casa para hacer lo que les gusta y otros han sufrido depresión y estrés por la situación. Lo que está claro es que cada individuo reacciona de manera diferente a una crisis de esta importancia.

Después de estar confinados durante semanas, hemos salido a la calle y hemos empezado a retomar nuestras relaciones sociales con la gente que hemos estado sin ver durante todo este tiempo. Hay algunos cambios en nuestra mentalidad, nuestros cuerpos e incluso nuestra manera de ser y, por supuesto, unos han engordado y otros han adelgazado.

Pero aquí es donde vienen los comentarios: “Has adelgazado un montón estos meses”, “estás mejor que nunca”, “¿es que no has hecho nada de deporte durante el confinamiento?”, y todas esas variantes que hemos oído en más de una ocasión. Pues ahora se pueden ver artículos y publicaciones de diferentes profesionales de la nutrición y la psicología en los que relatan la ansiedad que esto le puede provocar a algunas personas. A veces creemos que, por norma social, el estar delgado (o más delgado que antes) es lo mejor para alguien, es la mejor apariencia física que alguien puede tener. Cuidado. Nunca sabemos si esa pérdida de peso puede estar relacionada al entrenamiento y dieta de una persona, o a un trastorno alimenticio, a una consecuencia de la ansiedad y el estrés que en una gran cantidad de personas se ha manifestado a causa de la pandemia.

Recordemos que esta situación es excepcional para todos nosotros, que solo las generaciones mayores han pasado por guerras y situaciones mucho más duras que esta. Pero los demás, vemos el año 2020 como el peor año de toda nuestra vida. Podemos ver algunas consecuencias como pérdida o aumento del apetito, ansiedad, depresión, estrés y preocupación más alta de lo normal por la situación actual, entre otras, lo cual hace más difícil llevar unos hábitos saludables y regulares de comidas diarias y picar entre horas.

También debemos recordar que hacer cumplidos sobre lo delgado que está alguien nos lleva a la equivocada idea de que más delgado es mejor o que la delgadez es más bella o sana. Esto puede fomentar comportamientos de desorden alimenticio. La persona en cuestión puede pensar que si su cuerpo más delgado está bien ahora, ¿por qué no iba a estar mejor estando aún más delgado? También refuerza la idea de que valemos lo que pesamos, e indirectamente le dice a la persona lo mal que estaba antes de perder ese peso y lo mal que estará si lo recupera (algo muy común). Con esto no se fomenta la obesidad o la carencia de deporte en nuestras vidas, todo lo contrario, lo más importante es estar sano y equilibrado.

Y aparte de la crisis actual, en mayor o menor medida todos recibimos a diario comentarios sobre nuestro físico totalmente innecesarios, y muy frecuentemente de personas que ni siquiera nos conocen o tienen la suficiente confianza para decirnos algo relacionado con nuestra apariencia: “hoy tienes mala cara”, “¿es que no te has maquillado?”, “¿te pasa algo? Te noto muy seri@”, y un largo e innecesario etcétera que ojalá no tuviéramos que oír.

Nunca sabemos por lo que otras personas pueden estar pasando. El peso y nuestra relación con nuestros cuerpos son cosas muy personales. Quizá los cumplidos deberían ir enfocados más a la personalidad o al tipo de relación que tienes con la otra persona, olvidándonos un poco de la apariencia física. Siempre serán bien recibidos y a no ser que conozcamos mucho a la otra persona, pueden interpretarse de una manera muy diferente a la intencionada.

Post Comment